VIGILIA PASCUAL
“Lo que nunca debiéramos de olvidar es que
estamos llamados a la vida”, definió el obispo ante una multitud que se
congregó en la misa de Pascuas. El pastor exhortó a los fieles a dar
testimonio de nuestra experiencia de fe en Jesucristo Resucitado”.
“Hoy, queridos
hermanos, los exhorto a dar testimonio de nuestra experiencia de fe en
Jesucristo Resucitado”, dijo el obispo diocesano Monseñor Francisco
Polti durante la homilía de la Vigilia Pascual que tuvo lugar anoche en
la iglesia Catedral, y enfatizó que “resucitar es tarea y meta de cada
día”, lo cual puede traducirse en las expresiones de amor hacia el
prójimo.
Cientos de fieles colmaron anoche el principal templo capitalino para participar del rito en el que se celebra la resurrección de Jesucristo, y escuchar el mensaje del pastor de la provincia.
Junto a sacerdotes de la iglesia Catedral, Polti presidió la celebración que se extendió por espacio de casi dos horas, y en la que además se bendijeron el fuego y el agua, y se encendió el cirio pascual, símbolos principales del tiempo de Cuaresma.
La liturgia de la palabra, precedió a la celebración de la santa misa, con las luces encendidas a pleno en todo el templo.
Homilía
“Celebramos hoy el acontecimiento fundamental de nuestra fe. La verdad que sostiene toda la razón y existir de nuestra iglesia. Dios ha rescatado a la humanidad”, comenzó su mensaje monseñor Polti, para recomendar luego que la celebración de la Pascua es algo “que nunca debiéramos olvidar”, porque “estamos llamados a la vida.
“Este es el momento de recuperar a Jesús de aquellos sepulcros donde tal vez lo abandonamos hace tiempo. Cristo resucitó de entre los muertos y es el primero de todos los que por la fe habremos de resucitar con Él”, continuó.
Ahondó luego en los pasajes bíblicos al indicar que “acabamos de escuchar la mejor noticia de nuestra vida: ‘¿Por qué buscan entre los muertos al que vive? No está aquí. Ha resucitado’. Son palabras dirigidas a las mujeres que han permanecido al pie de la cruz, han sido testigos de la muerte de Jesús, y ahora son las primeras testigos del sepulcro vacío, de su resurrección. Son palabras que hoy también se dirigen a cada uno de nosotros”.
Camino de búsqueda
“Nuestra fe es un camino de búsqueda y hoy una vez más, debemos dejar de ‘buscar al que vive entre los muertos’. Para buscar a Dios en la vida, y dar testimonio de Él, Jesús nos marca el camino: es nuestra vida de cada día, nuestra familia, nuestros trabajos, nuestros quehaceres diarios. Entre ellos anda el Señor Resucitado, allí podemos encontrarnos con Él. Allí es donde Él nos llama a ser sus testigos”, prosiguió.
Luego exhortó a “dar testimonio de nuestra experiencia de fe en Jesucristo Resucitado”, y a demostrar “que somos personas resucitadas.
“Resucitar es tarea y meta de cada día (...) cumpliendo en todo momento la voluntad de Dios. Hacer oración constante es resucitar en la comunión con Dios. Las obras de misericordia que practiquemos con nuestros hermanos, especialmente los más débiles y desamparados, son formas de resucitar. Cuando pedimos perdón o lo otorgamos a quienes nos han ofendido, es resucitar. Ser diligentes y comprometidos en nuestras responsabilidades de estado y cada día, también son formas de resucitar”, enfatizó.
“Este es nuestro compromiso para este tiempo de Pascua: dar la vida como Nuestro Señor Jesucristo a través del ejercicio concreto de la caridad con el prójimo”, concluyó.
Cientos de fieles colmaron anoche el principal templo capitalino para participar del rito en el que se celebra la resurrección de Jesucristo, y escuchar el mensaje del pastor de la provincia.
Junto a sacerdotes de la iglesia Catedral, Polti presidió la celebración que se extendió por espacio de casi dos horas, y en la que además se bendijeron el fuego y el agua, y se encendió el cirio pascual, símbolos principales del tiempo de Cuaresma.
La liturgia de la palabra, precedió a la celebración de la santa misa, con las luces encendidas a pleno en todo el templo.
Homilía
“Celebramos hoy el acontecimiento fundamental de nuestra fe. La verdad que sostiene toda la razón y existir de nuestra iglesia. Dios ha rescatado a la humanidad”, comenzó su mensaje monseñor Polti, para recomendar luego que la celebración de la Pascua es algo “que nunca debiéramos olvidar”, porque “estamos llamados a la vida.
“Este es el momento de recuperar a Jesús de aquellos sepulcros donde tal vez lo abandonamos hace tiempo. Cristo resucitó de entre los muertos y es el primero de todos los que por la fe habremos de resucitar con Él”, continuó.
Ahondó luego en los pasajes bíblicos al indicar que “acabamos de escuchar la mejor noticia de nuestra vida: ‘¿Por qué buscan entre los muertos al que vive? No está aquí. Ha resucitado’. Son palabras dirigidas a las mujeres que han permanecido al pie de la cruz, han sido testigos de la muerte de Jesús, y ahora son las primeras testigos del sepulcro vacío, de su resurrección. Son palabras que hoy también se dirigen a cada uno de nosotros”.
Camino de búsqueda
“Nuestra fe es un camino de búsqueda y hoy una vez más, debemos dejar de ‘buscar al que vive entre los muertos’. Para buscar a Dios en la vida, y dar testimonio de Él, Jesús nos marca el camino: es nuestra vida de cada día, nuestra familia, nuestros trabajos, nuestros quehaceres diarios. Entre ellos anda el Señor Resucitado, allí podemos encontrarnos con Él. Allí es donde Él nos llama a ser sus testigos”, prosiguió.
Luego exhortó a “dar testimonio de nuestra experiencia de fe en Jesucristo Resucitado”, y a demostrar “que somos personas resucitadas.
“Resucitar es tarea y meta de cada día (...) cumpliendo en todo momento la voluntad de Dios. Hacer oración constante es resucitar en la comunión con Dios. Las obras de misericordia que practiquemos con nuestros hermanos, especialmente los más débiles y desamparados, son formas de resucitar. Cuando pedimos perdón o lo otorgamos a quienes nos han ofendido, es resucitar. Ser diligentes y comprometidos en nuestras responsabilidades de estado y cada día, también son formas de resucitar”, enfatizó.
“Este es nuestro compromiso para este tiempo de Pascua: dar la vida como Nuestro Señor Jesucristo a través del ejercicio concreto de la caridad con el prójimo”, concluyó.
Fuente : http://elliberal.com.ar
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