domingo, 10 de julio de 2011

FALTA DE RADARES CONVIERTE A SANTIAGO EN UN GIGANTESCO AEROPUERTO NARCO

juez molinari solicita radaresen el año 2009

Juez Molinari solicita radares en el año 2009

Grupos narco trasladan cocaína desde Colombia hasta el puerto de Buenos Aires a través de una ruta aérea que incluye a Santiago y Catamarca como escalas estratégicas. La falta de radares facilita las operaciones. El dato se confirma en los últimos operativos de Gendarmería que secuestró droga al interceptar avionetas en pistas clandestinas ubicadas en nuestra provincia.

El abogado cordobés Aurelio García Elorrio ubicó a Santiago del Estero como un paso obligado de la ruta de la cocaína que tiene por destino países europeos, y en muchos casos tienen relacion con asesinatos de personas, al referirse al caso del homicidio del policía Jonathan Barrera.

Respecto del porqué se utiliza el territorio santiagueño como un tramo de la ruta de la cocaína que se envía a Europa, el profesional explicó que la falta de radarización en la región permite el libre desplazamiento de las aeronaves que transportan el cargamento para la distribucion en las provincias, tambien para que sea cargado en los containers que lo llevan a los puertos.

Consultado sobre cómo funciona la ruta de la cocaína, García Elorrio explicó: “Gracias a la falta de radares, la cocaína es comprada en Colombia; transportada por avión y arrojada en bultos en las zonas desérticas limítrofes a Santiago del Estero y Catamarca. Sobre cómo funciona el narcotráfico en la Argentina, el abogado aseguró que en los 90 se empezó a instalar con mucha fuerza el tránsito, “donde mucha droga colombiana empezó a bajar por esos territorios.

Tengamos en cuenta que en 2008 la Organización de Naciones Unidas informó que en Europa unos 71 millones de personas han consumido sustancias prohibidas. Es mucha gente, a la que no se le puede cerrar el acceso a la droga”.

Luego de mencionar a Santiago del Estero y Catamarca como puntos estratégicos de la ruta. Además, es justamente por esta provincia donde la droga, luego de ser recogida, va por tierra y descubierta hacia las aduanas, para ser cargada en containers”.

Mientras tanto, el horrendo asesinato del policía Jonatán Barrera sigue conmoviendo a la población de la ciudad de Frías, departamento Choya, que exigen el esclarecimiento del crimen. La policía, sospechada de haber participado en la muerte del joven uniformado, no ha avanzado en la investigación y ha cometido gruesos errores en procedimientos y actuaciones. La justicia en lo Criminal y Correccional de Frías paralizó el proceso.

“Fue asesinado por estar detrás de una investigación a narcotraficantes”. Estas son afirmaciones contundentes de la ciudadanía frienses. Son reclamos que se formulan todos los viernes en las marchas de la madre, familiares, amigos y vecinos de Jonatán Barrera. Y son también acusaciones hacia un poder político encarnado por el intendente Néstor Humberto Salim, por su negligencia y permisividad al admitir la existencia de tres carteles que ingresan, comercializan y distribuyen drogas en la Ciudad del Oeste. Otros, directamente, hablan de “complicidad” del delegado del gobierno provincial en Frías y conspicuo representante del clan salimnista.

Para hoy, lunes, está anunciada la visita del gobernador Gerardo Zamora, por un par de horas, y los frienses van a tratar de expresarse y peticionar respuestas por el “caso Jonatán”, en la búsqueda de algún cambio de timón que permita el normal funcionamiento del poder político, de la justicia y de la policía.

Además, están alarmados en razón de que son “noticia nacional” por el tráfico de drogas que baja en territorio de Catamarca y que llega a Frías, sin que se conozcan tareas de averiguaciones o investigaciones de la policía de la zona, de la Federal o de la Gendarmería.

Sería bueno que Zamora le solicite al juez Federal, Guillermo Molinari que lo acompañe, al menos para interesarse por lo que está preocupando a estos santiagueños que claman por terminar con el flagelo del tráfico de drogas en esta región, ya que este magistrado en el año 2009 propuso la colocación de radares en nuestra provincia, también lo hicieron autoridades de Gendarmería Nacional. Hasta la fecha el gobernador hizo la vista gorda sobre los pedidos. Será a propósito??? Acaso tiene algún interés que no se descubran a los narcotraficantes???

También, debería ordenar a sus ministros de Justicia, Ricardo Daives y de Gobierno, José Emilio Neder, que den la cara y ayuden a brindar una respuesta clara y precisa a los frienses sobre sus diligenciamientos o acciones políticas que han realizado (sin entorpecer el accionar de la justicia), en procura de vigilar, proteger y dar seguridad a pueblos fronterizos por los que ingresan los narcos provenientes de otros países.

Fuente : Codigo Rojo

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